El diagnóstico del cáncer puede ser una experiencia perturbadora a cualquier edad, pero especialmente cuando el paciente es un niño.
A pesar de que se han realizado numerosas investigaciones sobre el cáncer durante décadas, todavía se desconocen las causas de la mayoría de los tumores infantiles. Cerca del 5% de todos los cánceres en niños son causados por una mutación genética hereditaria. Así pues, tal y como ocurre en los adultos, se piensa que en los niños el tumor surge como resultado de mutaciones en genes que causan un crecimiento celular descontrolado y posteriormente cáncer. En adultos, esto refleja los efectos acumulados del envejecimiento y de la exposición a las sustancias cancerígenas, sin embargo, la identificación de las posibles causas del ambiente en el cáncer infantil resulta más difícil ya que su incidencia es más rara y la determinación de los factores de riesgo mucho más complicada.
Hablando de la incidencia, actualmente se calcula 140 casos nuevos por cada millón de niños menores de 15 años. Además, en las últimas cuatro décadas, los avances en las técnicas diagnósticas y en los tratamientos del cáncer infantil permitió aumentar la supervivencia hasta un 76%. Aún así, el cáncer sigue siendo la principal causa de muerte en niños.
Los tipos de cáncer más frecuentemente diagnosticados en los niños de 0 a 14 años de edad son:
- Leucemia linfocítica aguda (LLA)
- Cáncer de encéfalo y otros tumores del sistema nervioso central
- Neuroblastoma
El cáncer infantil incluye todos los tipos de cáncer que se encuentra en los niños menores de 14 años, sin embargo, al menos el 85 % de todos los tipos presenta síntomas parecidos, y aunque existan diferentes señales que pueden hacer sospechar, los más significativos son:
- La detección de alguna alteración suele estar localizada en el cuello o en el abdómen
- Anemia con sangrado y exceso de moratones
- Dolor de cabeza con alteraciones de sueño, comportamiento y conducta
- Dolor de cabeza con vómitos nocturnos
- Fatiga, pérdida de peso y palidez
- Fiebre prolongada y sin causa aparente
- Ganglios linfáticos inflamados
- Hinchazón y masa abdominal anormal
- Infecciones frecuentes
Dado que la mayoría de los síntomas del cáncer pueden interpretarse como dolencias infantiles comunes, es dificil su diagnóstivo precoz, y éste, obviamente es la clave para conseguir el tratamiento más eficaz y aumentar las probabilidades de curación y calidad de vida. La Asociación Española contra el Cáncer (AECC) recomienda acudir al médico para descartar la enfermedad en caso de cualquier sospecha y el diagnóstico preciso corresponde a un médico especializado en la oncología infantil.
Cabe añadir que los tumores localizados en áreas críticas como el cerebro, por muy pequeñoi que sea, es muy probable que provoque síntomas en los comienzos de la enfermedad gracias a la presión que ejerce en el área. Al contrario pasa con otros cánceres que pasan desaparcibidos y su diagnóstico es posible ya en pleno desarrollo del mismo.
Existen numeroros tipos de tratamiento para el cáncer y éste dependerá del tipo de cáncer y de lo avanzado que esté. Los tratamientos más comunes son:
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