Ya hablamos con anterioridad de la espina bífida causada por la falta del ácido fólico, que es una de las vitaminas B. Del mismo modo, hablaremos de las consecuencias de la carencia de la vitamina B12 o también llamada cobalamina.
Se trata de una vitamina soluble en agua con sustancias esenciales que permiten el desarrollo intelectual e intervienen en el metabolismo del tejido nervioso. su déficit durante el embarazo, a posteriori, puede provocar en el niño una desaceleración y alteración del crecimiento.
La cobalamina se encuentra en casi muchos alimentos, desde carne y pescado hasta productos lácteos. Así pues, si se produce un déficit de esta, se pueden sospechar dos causas. Por un lado, puede que la dieta que se lleva a cabo es inadecuada. Con mayor incidencia las dietas veganas o vegetarianas tienden a presentar falta de vitaminas por lo que se administra suplementos. Y por el otro lado, puede que el niño tenga porblemas de absorción o asimilación de la vitamina en el cuerpo.
Para evitar los problemas de crecimiento que conlleva el déficit de la cobalamina, existe una serie de síntomas que permite diagnosticar la carencia de la vitamina:
- Anemia
- Debulidad
- Palidez
- Cansancio
- Hormigueo
- Dolores de cabeza
- Erupción cutánea alrededor de los labios, boca o lengua
- Diarrea
- Fiebre
- Falta de crecimiento
- Problemas de movilidad
- Pérdida de peso
- Dificultades para mantener el equilibrio
- Irritabilidad
En caso de ser una dieta inadecuada, basta con corregirla. Si se trata de una dieta vegetariana o vegana, se administrará suplementos de cobalamina.
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